WPO son las siglas de Web Performance Optimization, y se trata de mejorar la velocidad de carga de tu página web. Es importante destacar que las tareas de WPO no deben realizarse únicamente sobre tu dominio, si no sobre cada una de las secciones de tu página web, ya que determinadas páginas pueden requerir un […]
WPO son las siglas de Web Performance Optimization, y se trata de mejorar la velocidad de carga de tu página web.
Es importante destacar que las tareas de WPO no deben realizarse únicamente sobre tu dominio, si no sobre cada una de las secciones de tu página web, ya que determinadas páginas pueden requerir un trato especial. Existen numerosos factores que pueden afectar al rendimiento de tu página web y estos son algunos de ellos.
El servidor
Lo más básico e importante para tener un buen rendimiento es tener un servidor con unas prestaciones acordes a las necesidades de tu web. Para ello debemos tener en cuenta algunos factores como estos:
- Tipo de disco duro: ¿Conoces los discos SSD? Existen dos tipos, HDD y SSD, siendo estos últimos mucho más rápidos que los discos duros mecánicos convencionales, lo que conlleva a una mayor velocidad de carga de la web, sobretodo a la hora de trabajar moviendo grandes cantidades de datos
- RAM disponible: Un servidor con una RAM insuficiente puede provocar que los servicios del servidor se detengan o provoquen comportamientos inesperados.
- Transferencia: Debemos tener un servidor con una capacidad de tráfico suficiente para evitar problemas en casos de que tengamos muchas visitas de forma simultánea.
En Visualit utilizamos servidores con recursos más que de sobra para que tu web funcione lo mejor posible, y no te ponemos limitaciones de ningún tipo.
Compresión GZip o Deflate
Una de las formas más comunes de obtener mejores velocidades de carga es activando la compresión GZip, de manera que el servidor envía al cliente los datos en ficheros comprimidos, que se descomprimen en el navegador antes de visualizar la página.
Uso de la caché
Cuando accedemos a una página web por primera vez, el servidor (o el equipo del usuario, dependiendo del sistema de caché) almacena una «copia estática» de la página que estamos visualizando, de manera que si volvemos a entrar a la web, nos cargará esa «copia estática» de forma muy rápida, ya que el servidor no tiene que volver a generar todo el código que compone la página. En caso de que se realizasen cambios en la web, el sistema de caché se encargaría de realizar una copia nueva, o en algunos casos manualmente, en función del sistema de caché.
Optimización del HTML, CSS y Javascript
El mayor o menor tiempo que tarde en cargar una web dependerá directamente de cómo esté optimizado el código de la misma. Debemos evitar que el código tenga el menor número posible de caracteres, evitando espacios o saltos de linea que únicamente aumenten el tamaño de los ficheros.
Optimización de recursos
Las imágenes y los vídeos pueden ralentizar la velocidad de carga de una web. Para ello debemos mantener las imágenes optimizadas lo máximo posible, con un tamaño inferior a 100kb como mínimo. Si utilizamos video en nuestra web, deben ser videos cortos y con un peso bastante reducido para no entorpecer ni la carga ni la experiencia del usuario.
¿Está tu página web optimizada?
Puedes comprobar si tu web está optimizada mediante Google Pagespeed, y si no lo está, siempre puedes contactar con nosotros. ¡Estaremos encantados de ayudarte!